El pasado 27 de mayo celebramos en Ávila, el XXVII Encuentro Regional de Familiares de personas con discapacidad intelectual y del desarrollo. En él, participaron 150 familiares pertenecientes a asociaciones que colaboran y trabajan juntas en Plena Inclusión Castilla y León.

El tema principal de este encuentro fue el sobreesfuerzo que realizan las familias de personas con capacidades diversas durante toda su vida. Este sobreesfuerzo se da tanto a nivel económico, como personal y social. Las familias que tienen en su seno a una persona con capacidades diversas, padecen, en consecuencia, mayores necesidades económicas, sufren un mayor desgaste a nivel personal (tanto física como psicológicamente) y sus relaciones sociales están condicionadas por su familiar con capacidades diversas.

Quiero destacar la importancia de que las familias participen y aporten sus vivvencias en estos encuentros, en los que se reúnen personas de diferentes lugares y entidades con distintas necesidades de apoyo. Poner en común las carencias de este colectivo y renovar fuerzas y energías para seguir reivindicando los derechos de las familias de personas con capacidades diversas. Todavía queda mucho por hacer.

Por todo esto, es importante el trabajo que las familias realizan desde las entidades, parte fundamental del movimiento asociativo. Desde aquí luchamos juntos por los derechos de las personas con capacidades diversas y sus familias.

Y no solo participaron padres, también estaban hermanos, cuñados y sobrinos. Porque ellos también son una parte muy importante tanto de las personas con capacidades diversas como de las asociaciones de las que forman parte, son el relevo generacional necesario para continuar con los proyectos de vida de todas las personas con capacidades divesas. Si todos nos juntamos en pro de un mismo objetivo, este resulta más sencillo y juntos podemos reunir la energía necesaria para conseguir que la brecha de la desigualdad existente entre personas con capacidades diversas y el resto de la sociedad sea cada vez menor.

Desde las asociaciones, los profesionales, tenemos que trabajar con las familias para la organización de actividades y con el fin de darles los apoyos necesarios de la mejor forma posible en función de sus necesidades. Nosotros seguimos luchando porque las personas con capacidades diversas formen parte activa de nuestra sociedad.