Los alumnos y alumnas de primaria, secundaria y educación especial de varios colegios de Burgos han celebrado estos días en sus centros educativos la Semana de Acción Mundial por la Educación y la Paz, SAME 2018. Han sido días para conocer que hay muchos niños y jóvenes como ellos, en otras partes del mundo, cuyos países y territorios están en guerra, que tienen que huir de sus países a causa de la guerra, el hambre, la persecución y la pobreza. El acto fue resultado de una colaboración conjunta entre InteRed, Entreculturas, UGT Educación y Aspanias Plena inclusión Castilla y León.

El trabajo en el aula -con las fichas didácticas sobre educación para la paz, facilitadas por SAME 2018- les han dejado un poso y unas sensaciones que han expresado por escrito, y que el jueves 26 de abril contaron a los políticos del Ayuntamiento de Burgos, en la Sala Polisón del Teatro Principal. Fue un acto sencillo, en el que los relatores -en nombre de sus colegios- fueron contando su aprendizaje de estos días y las sensaciones que les ha provocado conocer más de cerca la realidad de niños y jóvenes que tienen que vivir en zonas de guerra.

Al final de sus relatos, los alumnos y alumnas pidieron a los representantes municipales que atendieran las peticiones que tenían que hacerles, y que desde sus cargos de responsabilidad contribuyeran a crear un mundo mejor e igualitario para todos.

Y llegados a este punto, Rodrigo García, en nombre de sus compañeros del centro Puentesaúco, pidió a los representantes del PP, PSOE, Imagina y Ciudadanos -presentes en la sala- que ayuden “a los centros a eliminar las barreras arquitectónicas y a adaptar los materiales escolares para que todos los podamos comprender, y a apoyar a las familias en los gastos escolares”. Y en un tono más global, Rodrigo pidió, en nombre de sus compañeros, “más talleres y programas para educar en paz y valores” y más ayuda y cooperación al desarrollo”.

Dicho queda.