El pasado 2 de mayo, 20 usuarios y usuarias de Aspanias, Asamimer y Aspodemi -junto a cinco personas de apoyo entre voluntarios y técnicos- pusieron rumbo a Benidorm (Alicante) donde tienen previsto pasar sus vacaciones este año, hasta el 8 de mayo.

“Estamos teniendo muy buen tiempo” lo que está favoreciendo la actividad de piscina y playa, aunque “les gusta más la piscina” confiesa Ana Sanz, la técnico de Aspanias que les acompaña.

Además de los chapuzones al sol, les espera estos días una ruta turística por Benidorm y visitar los pueblos de alrededor; otra visita a la fábrica de chocolates Valor (Villajoyosa), y al parque zoológico Terra Natura. La estancia en Benidorm se completará con ir también de tiendas en busca de un recuerdo de la zona, y ver el ambiente que se respira en sus calles y plazas. “La integración en general y en el entorno del hotel está siendo buena”, comenta Ana.

De parecida opinión -sobre la integración en el entorno-, es Lorena Saeta (técnico de ocio en Aspodemi), que también acompaña al grupo de Benidorm, y que estuvo al frente de otro grupo de personas usuarias de Aspodemi y Asamimer, que viajó a Benicasim (Castellón), entre el 7 y el 14 de abril. “El tiempo allí no fue tan bueno”, comenta Lorena. El grupo en el que viajaron 20 personas y 4 personas de apoyo, tuvo la oportunidad de visitar otras localidades como Peñíscola, la capital (Castellón), el Jardín del Papagallo (zoo de aves). La estancia se completó asimismo con playa y piscina (que en los días de mal tiempo cambiaron por una sala de cine).

Las vacaciones de las personas con discapacidad intelectual aumentan las posibilidades y recursos de diversión, descanso y esparcimiento. En el caso de las personas con discapacidad intelectual, la convivencia en ambientes distendidos potencia una mayor autonomía personal y las relaciones sociales. También el hecho de viajar y conocer otros lugares, facilita nuevas experiencias que contribuyen al desarrollo personal.

Aspanias viene desarrollando (desde hace unos 20 años) programas de vacaciones financiados con subvenciones del Imserso, a través de Plena inclusión, con el objetivo de facilitar su acceso a los recursos de ocio y con el fin último de mejorar la calidad de vida de las personas con discapacidad intelectual y de sus familias.